Parásitos externos: La pulga

Las pulgas constituyen uno de los ectoparásitos mas frecuente del perro y el gato. Son insectos achatados lateralmente, con un tamaño de 3,5 mm como máximo, que se alimentan de la sangre de los animales sobre los que viven. Las especies de pulga mas importantes para perros y gatos son Ctenocephalides felis (la pulga del gato) y Ctenocephalides canis (la pulga del perro).
Seria un error pensar que las pulgas tan solo constituyen una molestia para nuestras mascotas, pueden también transmitir enfermedades y severas infestaciones pueden ser especialmente peligrosas para la salud.
Las pulgas pueden también picar al hombre, produciendo lesiones papulares muy molestas.
LA PULGA: Ctenocephalides felis - Ctenocephalides canis.
Las pulgas con su aparato bucal incisivo-chupador, durante un período normal de succión entre 20 y 150 minutos, pueden absorber un volumen de sangre entre 10 y 20 veces superior al volumen de su propio estómago. La mayor parte se evacua de nuevo, de inmediato, y se encuentra en forma de diminutos cilindros rojo-parduscos en la piel y en la cama del animal.
La hembra pone en promedio unos 30 huevos por día, alcanzando la cifra máxima entre el día cuarto y el noveno. En condiciones favorables, las hembras pueden poner más de 100 huevos diarios.
CICLO DE DESARROLLO DE LAS PULGAS. Los huevos de pulga se depositan al azar, cayendo donde el animal huésped se halla en aquel preciso momento, desde la piel al suelo. De esta manera se reparten por la totalidad del ambiente. En función de las condiciones ambientales las larvas eclosionan al cabo de 1 a 10 días. Evitan la luz y se arrastran hasta las grietas, fisuras, textiles y fibras de alfombras. En esta situación se alimentan de residuos orgánicos y, sobre todo, de la sangre evacuada por las pulgas adultas, que es necesaria para coronar con éxito su desarrollo. Dentro de un período entre 5 y 14 días dependientes en cada caso de la temperatura y de la humedad relativa del aire, mudan dos veces y se transforman en crisálidas, que son la tercera larva de color parduzco y 5 mm de longitud, dentro de un capullo que han tejido ellas mismas.
El desarrollo dentro del capullo dura entre 5 y 19 días. Al contrario de las larvas, que son muy sensibles a los factores climáticos y a los insecticidas, la pulga se halla muy bien protegida dentro del capullo.
La pulga adulta, totalmente desarrollada, permanece inicialmente dentro del capullo y no eclosiona hasta que no recibe un estimulo adecuado. Estas condiciones se dan cuando, por ejemplo, el animal hospedante se acuesta sobre su cama o cuando una persona pisa una alfombra infestada con estos parásitos. Si faltan estos estímulos, porque no hay un huésped adecuado en los recintos infestados, la pulga adulta puede resistir hasta 5 meses, atrincherada dentro del capullo.
LA INVASIÓN DE PULGAS. Los propietarios de perros y gatos se lamentan cada vez más de que el problema de las pulgas llega a ser excesivo para sus animales domésticos. La infestación con frecuencia masiva de estos parásitos tiene su causa en:
- Los recintos provistos de calefacción central y alfombras, que durante todo el año proporcionan condiciones ideales para los estadios de desarrollo de las pulgas, favoreciendo la sucesión de su ciclo vital más allá de los meses de primavera-verano. Por tanto la prevención se debe hacer durante todo el año. Las condiciones óptimas para el desarrollo de estos parásitos son temperaturas de 27ºC y humedad del 80%. Según se modifiquen estas variables, el ciclo de vida durará menos o más tiempo (de 12 a 180 días)
- La población siempre en aumento de animales domésticos.
- Los parásitos que no se descubren a tiempo.
- Al primer síntoma de la infestación (el animal se rasca, se muerde) no se ataca el mal de raíz.
- Solo se trata contra las pulgas a la mascota, pero no el entorno, en el que tiene lugar el desarrollo de los estadios de la pulga.
DIAGNÓSTICO DE LA INVASIÓN DE PULGAS. Una plaga de pulgas en nuestros animales domésticos no se detecta fácilmente, ya que estos parásitos son muy diminutos y su anatomía peculiar les permite moverse con facilidad por la piel de su huésped, de tal manera que no llaman la atención, sobre todo si el perro o gato tiene pelaje largo. La primera indicación de la plaga suele ser que los animales se rascan y muerden, están inquietos o presentan incluso alteraciones cutáneas en la región de la grupa, de la inserción de la cola o de la región abdominal.
Para descubrir la infestación por pulgas es necesario realizar una inspección cuidadosa, revisando la base del pelaje, así se suelen descubrir a menudo las pulgas o sus excrementos en forma de pequeños grumos pardo-rojizos. Si se depositan estos grumos sobre un papel tipo filtro, humedecido, al poco tiempo se formará una mancha pardo-rojiza de hemoglobina alrededor de la partícula de excremento.
EFECTOS DAÑINOS CAUSADOS POR LAS PULGAS. Como muchas enfermedades ésta es una de las que más vale prevenir su aparición que luego tener que instaurar un tratamiento.
1 - Pérdidas de sangre: En caso de ataque masivo, los animales jóvenes y los ejemplares de razas caninas pequeñas pueden desarrollar anemia por la pérdida considerable de sangre.
2 - Transmisión de endoarásitos: Las pulgas son huéspedes intermedios de la tenia Dipilidium caninum Los excrementos de los perros portadores de esta tenia contienen proglótis, cuya forma recuerda la de las pepitas de calabaza o de pepino. Los huevos, que se encuentran en los proglótis, son ingeridos por las larvas de la pulga y se desarrollan en ellas hasta convertirse en cisticercoides. Cuando la pulgas infectadas parasiten a otro animal y este se rasque, muerda y se las trague, la tenia se desarrollara en su intestino.
En este contexto es importante que todos los perros, a los que se haya diagnosticado pulgas, se traten de manera profiláctica contra este parásito, con un antiparasitario interno.
3 - Enfermedades cutáneas causadas por las pulgas: Las pulgas provocan enfermedades de la piel por irritación local en el lugar de la picadura (dermatitis por picadura de pulga) y por reacciones alérgicas del organismo en general (dermatitis alérgica por pulgas).
La dermatitis por picadura de pulga afecta sobre todo el vientre, las caras internas de los muslos y la grupa de los animales afectados. Los síntomas más frecuentes son la rubefacción de la piel, la formación de pústulas y las lesiones debidas a irritación mecánica por rascado y mordedura en la zona que rodea el punto de la picadura. Por lo general, la dermatitis alérgica causada por las pulgas tiene una evolución más compleja. Una vez sensibilizado el huésped con determinados componentes de la saliva de la pulga, se desencadenan reacciones alérgicas.
Las secuelas de las reacciones alérgicas son lesiones costrosas, las alteraciones seborreicas, combinadas con la caída de pelo y daños resultantes de los lamidos y rascaduras constantes en amplias zonas corporales. La terapia de los pacientes exige gran dedicación, siendo posibles en todo momento las recaídas.
Especialmente en los pacientes ya sensibilizados a los alergenos de la saliva de la pulga es de importancia prioritaria una profilaxis contra la reinfestación por pulgas.